A Good Year - dvd review

Russel Crowe es un tremendo actor, puede pasar de ser un heroe fornido a un esquizoide matematico sin ningún problema. Ya ha probado su talento en potentes dramas y epicas peliculas de acción. Pero, siendo lo versatil que es, me cuesta visualizarlo en una comedia y menos aun en una comedia romántica. O sea, funciona bien cuando es el heroe medio bruto que se queda con la chica... ¿pero como un seductor? mmm... no se. En A Good Year intenta probarlo, pero hay una decena de dialogos que parecen desencajados y terminan siendo forzados y poco reales.

Quizás no toda la culpa es de Russel, la historia no lo ayuda mucho. A Good Year es la clásica historia de redención y autodescubrimiento de un tipo (Max) que desvió el camino y se convirtió en un cruel corredor de bolsa sin escrupulos, sentimientos ni amigos. Hasta que (como en toda película de redención hay un "hasta que") recibe como herencia tras la muerte de su tio, quien lo crió pero con quien no habla desde hace 10 años, su viñedo en Francia. Max debe viajar a Francia para realizar los tramites necesarios para vender la propiedad pero por circunstancias casi fortuitas se ve obligado a pasar una semana allí, donde se reencuentra con recuerdos de tiempos en que no era un "greedy bastard", cuando pasaba sus veranos aprendiendo importantes lecciones de vida con su tio Henry (Albert Finney).

Ok, el plot no tiene que ser necesariamente original para que una película funcione (y ojo, que a ratos sí funciona), pero definitivamente necesitamos ver grandes actuaciones y oir notables dialogos que nos mantengan atentos en la pantalla, perdonando (u olvidando) que sabemos perfectamente para donde nos está llevando el director. Por lo mismo, no es necesario un twist al final que nos haga replantearnos todo lo que vimos ni que sea completamente inesperado, para nada, lo que es necesario es que nos importe el dilema central de un personaje que se encuentra en la encrucijada de vender la herencia (y alma) de su tio, que claramente no necesita y francamente tampoco merece. Los elementos claves de una película de redencion es primero establecer un personaje que necesita ser salvado y luego demostrar que merece serlo. Lo primero lo logran, caricaturizándolo como un frio mercenario, peor que el Nicholas Cage de Family Man. De lo segundo no estoy muy convencido, por mucho flashback hacia una niñez cálida que haya.

Ridley Scott es un gran director de cine: te puede o no haber gustado Gladiador, pero es innegable que provoca emociones y al verla en pantalla gigante con sonido envolvente uno queda replegado en su asiento siguiendo minuto a minuto la odisea de Maksimus Aurelius. Alien, Blade Runner, Blackhawk Down son pruebas de lo mismo. Pero así como Crowe es poco creible como galán romántico, Scott tampoco funciona en películas más terrenales y cercanas a... bueno... la realidad (exceptuando quizás Thelma y Louise). Entonces cuando uno escucha que estos dos se vuelven a juntar, al menos se espera algo potente, que nos emocione y nos deje sumidos en nuestros asientos al terminar los creditos. Pero no. No pasa. A Good Year está en el mismo terreno de cientos de otras películas similares, tibias. Podria ser algo así como la mediocre combinacion de Entre Copas y Bajo el Sol de Toscana.

No me acuerdo que director dijo que "el 98% de una película es el casting" (¿Coppola?). Me gustaría saber como habría sido la peli sin Russel Crowe. Supongo que habría sido igual de obvia, llena de los cliches de un hombre que tiene que ser recordado del verdadero sabor de las cosas y que aprende mucho sobre bla bla bla. Pero Little Miss Sunshine nos mostró que una premisa cliché no es necesariamente algo malo: hay que saber que hacer con ella para convertirla en una joyita cinematografica.